El rey Tāwhiao Potatau Te Wherowhero VII, monarca maorí de Nueva Zelanda, falleció a los 69 años, anunció su oficina el viernes. El rey murió en el hospital donde se recuperaba de una cirugía cardíaca, pocos días después de celebrar el 18º aniversario de su coronación. Un comunicado de su oficina decía: «El fallecimiento del rey Tāwhiao es un momento de profundo dolor para los seguidores del movimiento Kīngitanga, para el pueblo maorí y para la nación en su conjunto». El comunicado continuaba: «El líder se ha ido al otro mundo. Descansa en paz». Un portavoz del rey, Rahui Papa, expresó en las redes sociales: «La muerte del rey Tāwhiao es un momento significativo de duelo para los seguidores del movimiento Kīngitanga, para el pueblo maorí y para toda la nación». Añadió que el rey había sido ingresado en el hospital para recuperarse de una cirugía cardíaca poco después de celebrar el 18º aniversario de su reinado. El rey Tāwhiao sucedió a su madre, la reina Dame Te Atairangikaahu, en 2006. El papel del monarca maorí no tiene autoridad judicial ni legal en Nueva Zelanda y es en gran medida ceremonial. El papel del rey maorí no es necesariamente hereditario; un nuevo líder será designado por los jefes tribales asociados con el movimiento Kīngitanga el día del funeral del rey Tāwhiao, pero antes de su entierro, según Radio New Zealand. El rey maorí es considerado el líder supremo de varias tribus, o «iwi», pero no las representa a todas. El movimiento Kīngitanga se originó en 1858 como un intento de unificar a las tribus indígenas de Nueva Zelanda bajo un solo líder para reforzar su resistencia a la colonización. El primer ministro de Nueva Zelanda, Christopher Luxon, comentó sobre el fallecimiento del rey, diciendo: «Su firme compromiso con su pueblo y sus continuos esfuerzos por defender los valores y tradiciones de Kīngitanga han dejado una marca indeleble en nuestra nación». Luxon agregó: «Recordaré su dedicación al servicio de Nueva Zelanda, su compromiso con Mokopuna (la próxima generación), su pasión por la cultura maorí y su visión de un futuro donde todas las personas sean tratadas con dignidad y respeto». La ex primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, señaló que el rey Tāwhiao fue un defensor del pueblo maorí y de la justicia, la equidad y la prosperidad. Los medios locales informaron que el rey será trasladado a su lugar de reunión, «Tūranga-waiwai Marae», y se espera que el funeral dure al menos cinco días. El cuerpo del rey Tāwhiao será colocado en Tūranga-waiwai Marae, la residencia oficial del rey, durante cinco días antes de ser trasladado a su lugar de descanso final en el monte Taupiri. Se espera que cientos de miles de personas, incluidos líderes de todo el Pacífico, asistan al funeral para presentar sus respetos. En una declaración, el rey Carlos III de Gran Bretaña dijo: «Mi esposa y yo nos entristecimos profundamente al enterarnos del fallecimiento del rey Tāwhiao». Agregó: «Tuve el honor de conocer al rey Tāwhiao durante décadas. Estaba profundamente comprometido con el avance de un futuro sólido para el pueblo maorí y para Nueva Zelanda, basado en la cultura, la tradición y la curación, y lo hizo con sabiduría y compasión.
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